La estrategia tiene facetas positivas, pero también negativas. En horas recientes el gobernador electo Miguel Barbosa Huerta presentó algunas de las cartas fuertes que van a participar en el próximo gabinete. En su mayoría se trata de perfiles escrupulosos, preparados y equilibrados. Los nombres que se han mencionado hasta la noche del domingo 16 son los siguientes:
– Abelardo Cuellar Delgado como futuro titular de la Secretaria del Trabajo,
– Rodrigo Osorio Díaz como próximo Secretario de Economía,
– Guillermo Ruiz Argüelles estará al frente de la Secretaría de Salud,
– Lizeth Sánchez García, representante del PT, irá a la Secretaría de Bienestar, antes Desarrollo Social,
– El presidente municipal de Izúcar de Matamoros, Melitón Lozano Pérez será el próximo Secretario de Educación Pública,
– Carlos Urbina Tanus estará en la Secretaría Infraestructura, Movilidad y Transporte y finalmente
– Fernando Manzanilla Prieto será ratificado en la Secretaría General de Gobierno.
De arranque podemos ver un gabinete sin figuras protagónicas, pero sobre todo sin proyectos transexenales. De los aquí mencionados ninguno ha mostrado pretensiones para contender en el 2024.
Muy probablemente Manzanilla busque la presidencia municipal de Puebla en el 2021, pero nada más y Lizeth Sánchez García claramente buscará un escaño en el Senado de la República en la próxima legislatura. Pero ninguno se está apuntando para suceder a Barbosa.
Un gabinete sin futurismos es sano y garantiza que la gran mayoría se conducirá con institucionalidad.
Sin embargo la realidad de la política nos obliga a considerar que Barbosa debe preparar el terreno para el futuro, porque tampoco puede dejar una brecha o una ruta sin trazar rumbo al 2024.
La Cuarta Transformación a la que se refiere López Obrador no se consumará en un sexenio.
El país lleva 36 años de gobiernos neoliberales, de los cuales el sexenio de Peña Nieto fue el más devastador, depredador y caótico. Si en realidad se pretende una transformación nacional ésta deberá cimentarse en por lo menos tres sexenios.
Los gobiernos estatales -como el de Barbosa-, están moral y políticamente obligados a crear, a construir las condiciones para que un régimen de izquierda pueda continuar durante esos tres sexenios.
Pero si de entrada no genera, no crea nuevos cuadros y una escuela de mujeres y hombres de fiel congruencia ideológica, en el próximo round es muy posible que vuelva Acción Nacional, ya que el 2 de junio demostró que está vivo y vigente.
Repetimos Barbosa está moral y políticamente obligado a construir los cimientos para el futuro de la izquierda en la entidad.
Dulcería poblana.
La operadora de Armenta, Inés Parra arremete contra Barbosa.
En horas recientes la legisladora federal Inés Parra volvió a arremeter en contra de Miguel Barbosa a quien señaló como un ‘gobernador ilegítimo’.
También acusó que el nombramiento de Olga Lucía Romero Garci Crespo como presidenta de la Comisión Inspectora es parte de un ‘pacto de impunidad’. Anticipó que si Jorge Estefan y Fernando Manzanilla son ratificados en el gabinete dicho ‘pacto’ quedará demostrado.
La gran pregunta es: ¿Acaso es posible que Inés Parra actúe realmente por su cuenta o en realidad sigue operando bajo las indicaciones de Alejandro Armenta?
El mismo Barbosa tiene la respuesta a la interrogante.
Como siempre quedo a sus órdenes en cupula99@yahoo.com
TAGS