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Cúpula / Xóchitl: la ‘rockstar’ contra la aplanadora. 

Puebla, Pue. martes 5 septiembre de 2023 / Desde hace años se advirtió sobre los riesgos de la polarización social.

El discurso que cada mañana se difunde agravia a grandes sectores sociales.

Las expresiones despectivas e hirientes sobre los “fifís, conservadores, clasemedieros, aspiracionistas, clasistas, racistas, muy hipócritas”, si bien rinden bonos electorales también generan un agravio social.

La ofensa cotidiana se convirtió en una herida que punza la piel de diferentes grupos.

En el discurso hay un repudio permanente contra aquellos que osan no coincidir con las tesis de la Cuarta Transformación.

Durante cinco años se fue incubando esa indignación en una sociedad polarizada y lastimada.

De entrada la estrategia es equivocada y las secuelas se van a dimensionar con el paso de los años.

Fracturar a una sociedad es una actitud rupestre.

Si bien puede ser útil en la arena electoral, en el ejercicio de gobierno es un recurso banal.

Los grandes estadistas de la historia jamás apostaron por la fractura social. Lejos de eso, inspiraron la unidad nacional.

Churchill, Cárdenas, Mitterrand así lo hicieron.

De ahí su grandeza y dimensión histórica. Incentivar la unidad fue el pedestal que los colocó en las páginas de la posteridad.

En estos tiempos por el contrario vemos una arenga maniqueísta que asemeja a las películas de Ismael Rodríguez: “ustedes los ricos, nosotros los pobres”, pero en la versión “ustedes los clasemedieros corruptos, nosotros los pobres inmaculados”.

En este contexto nacional en un momento sorprende una figura, una mujer dispuesta a responder al embate presidencial.

Sin duda Santiago Creel Miranda posee la cultura jurídica, política, el conocimiento de la estructura albiazul, sin embargo su perfil no despertó la efervescencia de una señora que llega en bicicleta a tocar las puertas de Palacio Nacional.

Una suspirante que no pierde oportunidad de responder, rebatir y enfrentar los argumentos del mandatario.

La señora no se amedrenta, no se intimida ante a la aplanadora que diariamente lanzan en su contra.

Por momentos asemeja a David contra Goliat.

Una mujer que desde su cuenta de X, antes Twitter, repele y se mofa de los ataques de López Obrador.

En el momento que apareció una figura que no se amilana ante el latigazo presidencial, comenzó a adquirir adeptos, seguidores. Entre los simpatizantes hay muchos ciudadanos que no son panistas, que nunca lo han sido, pero que se sienten agraviados por un discurso que consideran innecesariamente ofensivo.

Xóchitl poco a poco se convierte en una ‘rockstar’ entre los sectores contrarios a la 4T.

El contraste con la insípida Sheinbaum es abismal.

El proceso interno de la oposición revitalizó a las huestes panistas, pero el fenómeno va más allá de la militancia azul.

La suspirante busca aglutinar a los grupos que han sido ofendidos o ignorados en este sexenio. Y son numerosos.

Estamos presenciando el nacimiento de una ola que con las semanas y meses comenzará a crecer a niveles de efervescencia.

Empero en una lectura equilibrada se debe reconocer que Xóchitl no tiene posibilidad frente a la fuerza hegemónica de Morena.

Por supuesto que habrá de causar furor, llenará plazas y sacudirá auditorios.

Pero en este momento es imposible vencer al partido guinda.

Gálvez recuperará ese ánimo combativo que la oposición había perdido, dejará la semilla de una nueva oposición y pasará a la historia como la mujer que enfrentó a la aplanadora.

Y nada más.

cupula99@yahoo.com


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