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Cúpula / Coahuila: cuando se deja correr el caos.

Lo que sucede en Coahuila no tiene precedente.

Es un pandemónium, un completo desastre.

Las dirigencias del Verde Ecologista y del Trabajo desconocen a sus candidatos, pero a estas alturas es poco probable que los puedan cambiar.

A su vez los abanderados rechazan la decisión.

Pero ni siquiera el proceder anómalo de esas directivas podrá impulsar a Armando Guadiana el candidato de Morena.

Todo es un ‘show’, un montaje para tratar de sobar al suspirante del sombrero que irremediablemente está derrotado.

El candidato de la coalición opositora PRI – PAN – PRD, Manolo Jiménez ya tiene la gubernatura en el bolsillo de la camisa.

Todo lo demás solo es un espectáculo para consolar a Guadiana por el descalabro que viene.

Sin duda también le darán como premio de consolación la compra de miles de toneladas de carbón.

Pero como hemos subrayado en esta columna, las elecciones de Coahuila son un llamado de atención, una alerta para Morena Puebla.

La fractura interna fue provocada por Ricardo Mejía Berdeja quien al verse rechazado como formal candidato se fue al Partido del Trabajo (PT) aún a sabiendas de que el membrete rojo no le daría los números para llegar al triunfo.

Mejía sabe que va a perder, pero su motivación es una visceral y descarnada venganza.

Es una forma de decir: “Si yo no llego, Guadiana tampoco”.

Con estas acciones Ricardo liquidó su futuro político.

Jamás podrá volver a Morena; siempre será considerado un traidor y el PT ya lo desconoció.

Solo le resta “vender caro su amor” y negociar algunas posiciones en el futuro gabinete de Manolo Jiménez.

Las similitudes con Puebla son pasmosas.

Un suspirante -Alejandro Armenta-, que abiertamente se ostenta como “el puntero” y ya desde este momento advierte con “movilizaciones de su estructura social” en caso de una “imposición”.

Morena Puebla está ante una fractura anunciada, abiertamente cantada.

Si la cúpula nacional que representan el presidente López Obrador, el Secretario de Gobernación Adán Augusto López y Mario Delgado no controlan el proceso interno poblano en unos meses tendremos un escenario muy semejante al de Coahuila.

Desde este momento anótelo.

A algunos les sobran ganas de incendiar la pradera.

cupula99@yahoo.com

ROSARIO OROZCO CABALLERO: LA VOZ DEL BARBOSISMO QUE NO SE RAJA.

Un proyecto está en marcha. La Maestra en Educación Rosario Caballero Orozco da los primeros pasos en una ruta que ya no tiene reversa. Hace meses apuntamos que era clara una embestida contra el barbosismo. Datos de finanzas públicas y privadas; ataques personales -e incluso familiares-, contra la excoordinadora de Comunicación Social; el hackeo al celular de un asistente; todos claros indicios de una embestida que busca menoscabar al grupo del finado gobernador.

El lanzamiento de una campaña por parte de Orozco Caballero debe verse como una respuesta a esa andanada. La señora está hecha de la misma madera de su difunto esposo. Desde este momento podemos adelantar que no se va a rajar, no se va a doblar ante los ataques.

Y aquí hay un dato que conviene tener en cuenta. En su periodo como huésped de Casa Aguayo Barbosa Huerta realizó expedientes políticos de aproximadamente 350 agentes locales, funcionarios, exfuncionarios, legisladores, académicos y suspirantes a diferentes cargos.

El archivo político de Barbosa está en manos de Rosario Orozco Caballero. Es de esperarse que a su debido momento surjan datos reveladores.

AVANCES EN LA INVESTIGACIÓN DEL CASO MARCO AURELIO. 

Las pesquisas sobre el homicidio del ciudadano Marco Aurelio Ramírez Hernández están avanzadas en un 90 por ciento. La víctima durante cuatro décadas ejerció el periodismo y en años recientes fue funcionario municipal; concretamente ocupó el cargo de director general de gobierno en el breve periodo de Felipe Patjane Martínez.

Durante su paso por la administración municipal Marco Aurelio proporcionó información para la captura de ocho cabecillas. Se presume que el crimen estaría relacionado con esa etapa, aunque aún no se determinan los móviles, las motivaciones que llevaron al sicario a disparar su arma con tal saña.

Marco Aurelio recibió cinco disparos; dos en el pecho, dos en la espalda y uno en la nuca. Esto nos habla del nivel del encono y agresividad de la ejecución.

Como lo apuntó el presidente López Obrador los asesinos materiales están plenamente identificados. Solo es cuestión de tiempo para su captura.

Como siempre quedo a sus órdenes.

 


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