El tema despierta todas las suspicacias.
Hace unos días Lourdes Rosales anticipó el proyecto para la compra de 8 mil cámaras de video-vigilancia que supuestamente habrán de reforzar la seguridad en la ciudad de Puebla. Ella misma calificó la iniciativa como “muy ambiciosa” y además pretende agregar las cámaras de particulares a un gran sistema de monitoreo.
Lamentablemente todas las acciones que emprende el Ayuntamiento de Claudia Rivera Vivanco están caracterizadas por una terrible opacidad que pretende encubrir anomalías administrativas. Lo mismo sucedió con los bolardos, la señalética, los ventiladores, las mini-despensas, etcétera, etcétera.
Todo lo que toca la señora se convierte en sombras; cifras infladas; manejos en la oscuridad; contratos que pretenden ocultarse.
Y si este proyecto de adquirir 8 mil cámaras de video-vigilancia se concreta, no será la excepción. Desde este momento podemos anticipar que aquí también habrá enjuagues bajo la mesa.
Rivera Vivanco deberá publicar una licitación abierta y nacional. Los proveedores deberán presentar todas sus referencias y costos. Esto que parece tan sencillo, de ninguna manera se hará.
En unas semanas Claudia evitará hacer declaraciones sobre el tema y de la noche a la mañana aparecerá una empresa proveedora de incierto origen. Será una evidencia más a todo el expediente que ya obra sobre las anomalías de la alcaldesa fallida.
Tarde o temprano sus agravios y exabruptos tendrán consecuencias.
Al tiempo.
Miscelánea poblana.
Por tercera ocasión Álvaro Alatriste busca la presidencia de Tehuacán.
Al mediodía del martes 30 el equipo de colaboradores de Ascensión Álvaro Alatriste Hidalgo circuló la fotografía de su formal registro como aspirante a la presidencia municipal de Tehuacán.
El portal e-consulta publicó una nota con el encabezado: “Alatriste busca por segunda vez alcaldía de Tehuacán”.
Debemos hacer la precisión que es la tercera.
Alatriste llega a la política en el año 2001; Melquiades Morales Flores era el gobernador y Moreno Valle Rosas el omnipresente Secretario de Finanzas. Desde que Rafael conoció a Álvaro le tomó un especial afecto y fue su principal impulsor para llegar a la alcaldía.
Ese año de 2001 el poderoso “delfín” envió a todo el Grupo Finanzas a operar en la otrora Ciudad de las Granadas; Antonio Peniche García, Fernando Manzanilla Prieto, Marcelo García Almaguer fueron parte del equipo que coordinó y dirigió la campaña.
En esos años Alatriste fue un consumado morenovallista. Ironías de la política, en 2010 se dio un acre distanciamiento y cada quien caminó por rutas distintas.
En 2013 ya en el sexenio azul, Álvaro buscó por segunda ocasión llegar al palacio de Tehuacán, pero aún estaba bajo la inhabilitación que le había impuesto el congreso marinista.
Fue entonces cuando lanzó a su esposa Ernestina Fernández Méndez. En cuanto Moreno Valle se enteró montó en cólera; aseguran los testigos que la furia fue inusual. En ese momento ordenó todo el apoyo para el candidato del PAN René Lezama Aradillas.
Pero Alatriste ganó por segunda vez la elección, a través de su cónyuge.
Durante todo el cuatrienio se libró una guerra sin cuartel entre gobierno estatal y municipal. La administración de Ernestina Fernández recurrió a tres controversias constitucionales para evitar su remoción y que le retiraran el cobro del impuesto predial. Contra muchos pronósticos terminó su periodo.
El último día de noviembre, por tercera ocasión Alatriste recurrió al seno tricolor para solicitar su registro como aspirante a la presidencia de Tehuacán.
Y vaya que causó revuelo.
Como siempre quedo a sus órdenes en cupula99@yahoo.com
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