Con nuestra solidaridad a los compañeros de los portales MTP Noticias y Almanaque Puebla.
Lo que estamos presenciando es una venganza, un acto de revanchismo, de represión. Esto refleja el verdadero carácter de Claudia Rivera Vivanco: colérico y rencoroso.
En horas recientes se documentó la forma en que brigadistas de la candidata obstruyen e impiden el trabajo de los reporteros de MTP Noticias y Almanaque Puebla.
Leobardo Rodríguez da las indicaciones a los brigadistas para bloquear y embestir a los reporteros incómodos a la abanderada. Incluso ahora aparecen en el contingente de Claudia un grupo de golpeadores.
Rivera Vivanco llega al grado de tratar de impedir la cobertura de su lamentable y errática campaña; pretende ocultar los reclamos y señalamientos que los ciudadanos le hacen; busca esconder sus actos donde la presencia, las porras y los gritos son de sus brigadistas porque los poblanos son los grandes ausentes.
En los recorridos de Claudia se respira la desesperación, la frustración, el coraje.
No puede digerir que en las calles es repudiada.
Pero en lugar de aceptar los hechos con madurez y humildad, lo que hace es entrar en polémicas ante los señalamientos; ya se han dado altercados verbales entre los ciudadanos y la candidata; la alcaldesa con licencia monta en cólera cuando le hablan de Lalo Rivera y ni siquiera el cubrebocas puede ocultar su semblante colérico.
Hace unos días lo apuntamos; la ira de Claudia va en ascenso mientras su campaña va en descenso.
Solo falta que se convierta en la versión de Alfredo Adame y le miente la madre a los poblanos. Vaya, solo eso falta.
Los medios deben estar muy atentos al proceder del equipo de Rivera Vivanco; conforme avance la campaña la tensión, la irritación y el encono irán aumentando. En la última semana bastará una pequeña, una minúscula chispa para que Claudia estalle como polvorín.
La candidata ya no aguanta lo duro, sino lo tupido y las expresiones de Liza Aceves demuestran que es una campaña que está contra las cuerdas; solamente tratan de parar los golpes que están recibiendo.
Y cuando lo hacen desatan mayores tormentas.
Barbosa en Proceso ¿Dónde está la anomalía?
La nota de la revista Proceso tiene todo el tufo de un señalamiento incisivo.
1. En su momento no solo Barbosa sino prácticamente todos los legisladores de la Cámara Alta aprobaron la reforma energética peñanietista.
2. Ya como gobernador declaró el calado de las inversiones que se preparaban para Puebla en materia de energías alternativas.
3. El despacho Accuracy Legal and Consulting está dentro del padrón de proveedores del gobierno del estado.
4. Después de la contrarreforma de López Obrador el ejecutivo estatal subrayó los litigios que habrían de suceder, tal y como está ocurriendo.
Entonces ¿Dónde está la anomalía?
Los señalamientos que haga o pueda hacer Emilio Lozoya son parte de un gran Reality Show, un espectáculo de pésima manufactura; vaya hasta las presentaciones del desaparecido Teatro Blanquita tenían más profesionalismo.
Hasta el momento Lozoya goza de completa impunidad; la Cuarta Transformación le brindó un indulto que permanece inamovible; las supuestas acusaciones sobre su madre, esposa y hermana parecen guion de telenovela.
Lozoya está bajo un falso proceso penal; solo como un espectáculo dictado desde la Fiscalía General de la República (FGR).
Lo que pueda decir o lo que quiera callar se debe entender como parte de un ‘sketch’ que no tiene formalidad, ni rigor alguno. Es un burdo montaje.
Como siempre quedo a sus órdenes en cupula99@yahoo.com
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