La visita del presidente de la República Andrés Manuel López Obrador fue ocasión para ratificar la buena relación que sostiene con el gobernador Barbosa Huerta.
En un escenario nacional complicado y tortuoso; cuando un bloque de diez gobernadores abandona la Conago en una clara fractura con el mandatario federal; cuando del otro lado de la banqueta hay gobernadores como Cuauhtémoc Blanco o Cuitláhuac García Jiménez que no atan, ni desatan y se constituyen en un cero a la izquierda, la voz del ejecutivo poblano es la única que se levanta en apoyo a López Obrador. Repetimos: la única.
En una parte de su intervención el ejecutivo federal dejó entrever que recibió informes negativos sobre la salud del poblano.
Evidentemente hay protagonistas locales que insisten en el rumor de que el gobernador tiene graves problemas de salud. Hace meses circularon la versión de que había sido hospitalizado; no pierden la oportunidad de filtrar dardos de dolo e inquina.
Puede ser un rector que ya prepara campaña rumbo a una diputación federal que le permita gozar del urgente y anhelado fuero. O puede ser una alcaldesa que también intuye que hay un penal esperándola.
En ambos casos las intrigas y malos informes no han podido prosperar. En el acto del sábado el mandatario federal subrayó su buena relación afirmando:
“Celebro que esté muy bien de salud el gobernador Miguel Barbosa. Hace unos días me informaron de que estaba mal, me preocupé; ya luego tuve un reporte de que gozaba de cabal salud el gobernador.
Y ahora lo muy bien de salud, de ánimo, de semblante, pero sobre todo muy lúcido.
Y me da muchísimo gusto que esté muy bien el gobernador de Puebla, que está trabajando en beneficio de todos los poblanos y que está trabajando de manera coordinada con nosotros, lo mismo puedo decir de la presidenta municipal de Puebla que también nos está apoyando”.
Hasta aquí la cita al presidente de la República. Estamos ante una relación firme y sólida, que nadie podrá afectar.
Miscelánea poblana.
“La Tremenda Comisión de Gobernación” compite con Tres Patines.
A finales de la década de los años 40 y hasta inicios de los 60 en Cuba se transmitía un programa de radio que llegó a todos los países de habla hispana.
Durante poco más de una década, cuando la radio era el principal punto de entretenimiento de las familias, el programa “La Tremenda Corte” fue un verdadero fenómeno de regocijo y diversión popular.
Curiosamente el régimen castrista y la censura que ejerció en la radiodifusión hicieron que concluyera aquel programa que tiene un lugar en las páginas del humorismo.
Durante más de una década las historias, los enredos y confusiones de los personajes de José Candelario Tres Patines, El Tremendo Juez, Luz María Nananina y el emblemático gallego Rudesindo Caldeiro y Escobiña, provocaron carcajadas en miles y miles de hogares.
La historia viene a cuenta porque ayer domingo 20 de septiembre escuchamos los argumentos tardíos y atropellados de la diputada Rafaela Vianey García Romero mientras trata de resolver el caso Tehuacán.
En la misma sesión se acusó que Rafaela Vianey convocó a la Comisión de Gobernación a las 9 de la noche del sábado y a la una y media de la madrugada del domingo estaba enviando el dictamen.
Los enredos, la demora y la lentitud de la diputada García Romero la convierten en un personaje de “La Tremenda Comisión de Gobernación”.
Dentro de todo ese desastre que representa el papel de Rafaela Vianey hay una luz al final del túnel.
También ayer domingo 20 se presentó a Fernando Sánchez Sasía como titular del Concejo Municipal que se habría de instalar en Tehuacán. Esto en caso de que la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) resuelva en favor del Congreso del Estado en la controversia constitucional que ya interpuso el alcalde suplente.
El empresario Sánchez Sasía representa la oportunidad de rescatar a Tehuacán de la catástrofe que generaron Felipe Patjane Martínez y su suplente Andrés Artemio Caballero López.
Fernando pertenece a una respetable familia; es una figura reconocida en el ámbito empresarial; fue miembro del Consejo Ciudadano que construyó el edificio de la Cruz Roja, delegación Tehuacán; su labor social está debidamente acreditada.
El negrito en el arroz es la presencia de la señora Martha Mendoza Muñoz, una empresaria de anuncios publicitarios. Durante el pasado cuatrienio la señora se benefició ampliamente gracias a sus nexos con la priista Ernestina Fernández Méndez y en la campaña de 2018 operó para el candidato tricolor Milton López Bretón.
En fechas recientes fue privilegiada por la Dirección de Desarrollo Urbano en el periodo de Felipe Patjane.
Sería muy lamentable que quien tuvo nexos y enjuagues con pasadas administraciones, ahora aparezca en el grupo de rescate.
Como siempre quedo a sus órdenes en cupula99@yahoo.com
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